La pandemia de la Covid-19 ha afectado a todos los aspectos de nuestra vida cotidiana (social, económico, sanitario…). Uno de los sectores más afectados es el laboral, ya que las empresas al haber estado cerradas tanto tiempo, han tenido pérdidas desorbitadas.
Para ello han resurgido herramientas que ayudan a la estabilización del empleo, por ejemplo, los ERTES. En el artículo 22 del Real Decreto-Ley 8/2020, del 17 de marzo, se establece la posibilidad de acogerse a este tipo de herramientas por causa de fuerza mayor.
A raíz de esta crisis socio-sanitaria, el mundo del trabajo ha cambiado por completo. Las empresas no buscan las mismas competencias que antes para sus empleados. Por ello, los empleados deben saber adaptarse al nuevo modelo laboral creado a partir de esta situación.
Aquí vamos a dar las claves más importantes para poder adaptarnos al mundo laboral tras la crisis del Covid-19.
- Las empresas van empezar a dar mucha importancia a las relaciones sociales tanto entre los compañeros de trabajo como de cada trabajador de forma individual. Por lo que los empresarios comenzarán a ofrecer herramientas para poder escuchar y detectar las preocupaciones y problemas de sus empleados a tiempo para no caer en una política reactiva.
- Modelos de trabajos más flexibles. A pesar de los efectos causados por la pandemia, España es un país donde su longevidad va en aumento. Por este motivo, si las empresas quieren mantener a sus trabajadores durante más tiempo, deberán adaptar su actividad laboral a las condiciones de la persona que la desempeña e ir disminuyendo la actividad física de los empleados por la automatización.
- Se va a potenciar el “upskilling” y el “reskilling”. Es decir, la adquisición de nuevas competencias y el reciclaje profesional. Tanto la propia crisis del COVID, como la rápida evolución de la Inteligencia Artificial, han provocado que los trabajadores tengan que estar formándose continuamente en el ámbito de las nuevas tecnologías y sistemas de información. Con el fin de poder integrarse en un mundo prácticamente digital donde para todo es necesario el uso de internet.
- La incorporación del teletrabajo, recogida en el Real Decreto-ley 28/2020, de 22 de septiembre, del trabajo a distancia. Debido al confinamiento inicial donde no se podía salir de casa, las empresas que estaban preparadas optaron por el teletrabajo de sus empleados.
Los managers de las empresas, tendrán que reinventar su manera habitual de gestionar equipos si la gran parte de ellos trabajan en remoto.
- Creación del derecho a la desconexión digital. La inclusión del teletrabajo ha provocado que, los trabajadores al realizar su actividad laboral desde casa, pasen más tiempo trabajando que si estuviesen en el lugar físico.
Por ello el Parlamento Europeo ha aprobado una resolución para regular este derecho mediante una directiva. Lo que pretende con esta directiva europea es: una remuneración justa, limitación del tiempo de trabajo y el equilibrio entre la vida profesional y la vida privada.
En nuestro país, este derecho a la desconexión digital y limitación del uso de dispositivos digitales, viene recogido en el artículo 20 bis del Estatuto de los trabajadores.
- Las empresas comenzarán a crear estrategias que ayuden y faciliten el bienestar mental de sus trabajadores. La pandemia ha provocado en miles de personas inestabilidad emocional y mental debido a los grandes impactos sociales que hemos vivido. Por ello, una de las prioridades de las empresas será comprender y ayudar a los empleados a encontrarse bien mentalmente para así poder desarrollar su actividad laboral de una manera más eficiente, ágil y productiva.
El derecho a la salud en todos los ámbitos, de los trabajadores viene recogido en el artículo 19 del Estatuto de los trabajadores.
- Mayor importancia a la innovación. Las empresas van a buscar gente para contratar con ideas frescas e innovadoras. Quieren que toda la plantilla de forma colectiva, contribuya a las ideas para mejorar la empresa, desde los empleados menos cualificados hasta los altos cargos.
- Gran importancia a los empleados “Seniors”. Las empresas valorarán más a los empleados más antiguos por su capacidad para sobreponerse a cualquier tipo de contratiempo.
Varios estudios realizados demuestran que los profesionales de más de 50 años serán imprescindibles para la recuperación económica post-Covid. Esto se debe a que al haber vivido varias crisis que han provocado un cambio y transformación completo del interno, podrán adaptarse a cualquier situación futura.
