La Audiencia de Pontevedra ha sentenciado la retirada de la custodia compartida a un padre que dejaba jugar a su hijo al videojuego Fortnite. Por tanto, ahora la madre tendrá la custodia exclusiva de su hijo.
La sentencia recoge que el padre era demasiado permisivo con respecto a las horas que su hijo pasaba jugando a este videojuego. “Mientras que la madre prohibía la consola en casa entre semana, el padre le dejaba usarla a diario”, determina la resolución.
Además, ha quedado probado que el padre le compraba complementos para el juego, incentivando así sus ganas de jugar.
La adicción del menor al Fortnite
Según la sentencia, el niño de 13 años estaba diagnosticado con un problema de adicción. Y es que, según ha demostrado el juez, el Fornite le causó una bajada notable en su rendimiento escolar. Además de los nueve suspensos en el segundo trimestre, el videojuego también ha afectado a sus actividades extraescolares (fútbol, inglés e informática).
De esta forma, ha quedado probada también la diferencia de opiniones entre ambos progenitores; mientras el padre era permisivo comprándole accesorios para que pudiese seguir jugando, la madre le prohibía jugar entre semana al videojuego.
Además, el padre habría permitido a su hijo abrirse cuentas en redes sociales como Instagram sin el conocimiento de la madre. Esto pone de manifiesto, dice el psicólogo del menor, el “enganche” que el niño tiene al Fortnite. Además, el profesional ha desaconsejado el videojuego por la posibilidad de crear “problemas académicos, emocionales, deterioro social, problemas conductuales y trastornos de ansiedad y del estado de ánimo”.
La sentencia
La resolución ha afirmado que “el régimen de custodia compartida ha fracasado”, afectando en el entorno social y académico del menor debido a su adicción al juego. Ahora esta será modificada por una custodia monoparental, dejando a la madre la custodia exclusiva del menor. Sin embargo, esta misma refleja que el padre podrá tener un amplio régimen de visitas.
El padre ha recurrido ante el Tribunal Supremo alegando que faltan informes técnicos que secunden esta decisión.
