La Sala de lo Penal del Tribunal Supremo (TS) ha condenado a dos años de prisión a una enfermera del Servicio Aragonés de Salud por acceder al historial médico de una antigua amiga y revelar secretos médicos.
Los hechos ocurrieron en el mes de marzo de 2017, cuando estas dos mujeres se encontraron por la calle. Según el relato, ambas habían mantenido una relación de amistad, pero esta ya se había acabado. Es entonces cuando al verse, comenzaron a discutir y la enfermera le dijo textualmente: “Tu marido es un cobarde y un sinvergüenza y además sé que tu hermana tiene VIH”. La sanitaria amenazó a su antigua amiga con desvelar información médica a la que tenía acceso gracias a su profesión.
Acceso al historial clínico
Ante las graves amenazas de la enfermera, la otra mujer decide denunciar lo ocurrido y además se puso en contacto con los servicios sanitarios de Aragón. Estos últimos iniciaron una investigación y descubrieron que había dos accesos a la base de datos del historial clínico de la demandante por parte de la acusada.
En un primer momento la Audiencia Provincial de Zaragoza condenó a la profesional sanitaria a tres años y tres meses de prisión además de seis años de inhabilitación profesional como enfermera por un delito continuado de revelación de secretos. Sin embargo, el Tribunal Supremo reduce la condena, tras el recurso de la acusada, a dos años de cárcel.
Y es que el TS afirma que no hay pruebas suficientes como para demostrar que fueran punibles los dos accesos de la enfermera a esos expedientes clínicos, porque no se ha podido precisar con exactitud qué datos consultó en una de esas incursiones, en la segunda concretamente. Y, por ello, entienden los magistrados del Supremo que no se puede imponer una condena por la comisión continuada del delito. El resultado es que le rebaja la pena de cárcel a dos años, aunque le mantiene los seis de inhabilitación.
