El teletrabajo se ha visto instaurado de repente, dejando de lado las organizaciones tradiciones, y volviéndose más común las virtuales.
A su vez los teletrabajadores, ahora muy comunes, necesitan teledirectivos, es decir, lideres capaces de dirigir en remoto.
Por una parte, teletrabajar exige a los directivos un nuevo tipo de conocimientos y habilidades. El teletrabajo reduce el nivel de interacciones, rompe los muros entre la vida familiar y personal, mezcla las tareas cotidianas y se desarrolla en un entorno doméstico. El teletrabajo se realiza en lugares poco adaptados a las necesidades del trabajador, y nos exige ser especialistas en tecnología y telecomunicaciones.
Por otra parte, para ejercer un buen liderazgo se requiere reflexionar y adoptar una estrategia clara sobre cuatros aspectos fundamentales; la cultura organizativa, los procesos y protocolos, la tecnología, y todo lo que genera su uso, y las personas.
El teletrabajo exige a los lideres centrarse en cada individuo. Exige conocer sus necesidades y expectativas personales y profesionales para poder construir puestos adaptados a las circunstancias de cada uno, y lograr que cada persona de lo mejor de si misma.
Los teledirectivos se tendrán que ocupar no solo de la tecnología, sino también de garantizar la seguridad de la información y respetar la privacidad, y contribuir a la eficiencia, evitando la implantación de herramientas que duplican funcionalidades y confunden a los usuarios o herramientas que son demasiado complejas de utilizar o que no son estables.
Con el teletrabajo se ha puesto de manifiesto un ahorro en costes de oficina, que podrán ser sustituidas por espacios de coworking, trabajo cooperativo, o similares. También se ha permitido la medición de resultados y sistemas de compensación más justos, vinculados al desempeño. Y también a partir del e-learning, se ha permitido formar a los profesionales teniendo en cuenta sus necesidades de aprendizaje, conciliación y rendimiento.
En definitiva, el Covid-19 nos ha dado la oportunidad de crear un nuevo modelo laboral que pone en el centro a las personas y su bienestar.
