Abengoa se ha dado de plazo hasta el 27 de julio para tomar la decisión sobre de si recurre al concurso de acreedores, será en la fecha señalada cuando el consejo de a conocer la decisión final.
Con una situación financiera al borde del abismo, si el día fijado consigue el respaldo de los bancos y del Gobierno, así como, proveedores todavía necesitará aún de varias semanas más para la autorización de aquellos tenedores de 3.000 millones de deuda.
La restructuración de 2019 fue llevada a cabo por estos acreedores quienes asumieron el control de mediante la transformación de deuda en bonos convertibles a través de las acciones Abenewco1 vehículo que posee una gran numero de activos de la compañía. Según fuentes estos acreedores tienen derecho de hasta de un 77,5% de la sociedad frente al 22,5% restante que fue transferido a bancos y fondos.
El plan de rescate de la ingeniera formula distintos tramos de deuda de hasta un 90% a cambio ofrece a sus acreedores la entrega de su mayoría de sus activos, incluidos aquellos bancos a los que ha solicitado el crédito de 250 millones de euros. La fórmula de Abengoa es que tanto los antiguos como los nuevos acreedores reciban un 90% de Abenewco1.
Esta propuesta sólo seguirá adelante una vez consiga el crédito de 250 millones de euros con la participación de Bankia, Calyon, y otras entidades como Caixabank, y, además necesitará la colaboración del Gobierno mediante el Instituto de Crédito Oficial avalando el préstamo y con una garantía del 50% del Cesce, y la cancelación de deuda de los proveedores, la empresa además necesitara el consentimiento de los bonistas para poder realizar la restructuración.
La compañía espera lograr un acuerdo de financiación con el Estado, acreedores y entidades financieras en los próximos días. Asimismo, el mercado se ha mostrado positivo frente al posible acuerdo de refinanciación esta semana, subiendo las acciones de la ingeniera un 60% a escasos días desde la suspensión de la cotización por la Comisión Nacional de Mercados de Valores (CNMV).
